La vida sigue, con o sin nosotros es cierto, pero No sigue igual… No sigue igual cuando la persona que desaparece (se muere para no usar más eufemismos), es una persona joven. Quedan unos padres que nunca encontraran consuelo ni sosiego posible, porque no lo hay y quedan unos hijos huérfanos para siempre. A partir de aquí todo son parches y remiendos. Queda un marido que después de muchos meses, muchísimos de lucha de trasiego de médicos, tratamientos, quimios, entradas y salidas interminables del hospital, de un agotamiento que va más allá del cansancio se las va a tener que ver cara a cara con unos niños pequeños que nunca van a entender porque SU madre no va a volver, por que esto no hay quien lo acepte ni lo entienda, y te marca toda la vida.
No consuela que nos vigile desde el cielo, ni que sea una estrella más ni todas las cosas que les podemos decir con más buena voluntad que otra cosa. El agujero es insalvable, no hay consuelo. La ausencia se palpa.
Dicen que el tiempo lo cura todo, pero no es cierto. Lo hace menos grave y pasa a ser una dolencia crónica.
Van a rehacer la vida. Re-hacer, es un apaño antes del cual, se da por supuesto que te la han deshecho. Y lo harán.
La rabia e impotencia de los amigos.
Dolor sincero por ella y por la familia. Dolor egoísta al recordarnos la levedad con la que transitamos por la vida. Todo se mezcla y todo duele. Pena, rabia, impotencia y al final mucho miedo.
Miedo por que no nos enseñan como afrontar estas pérdidas, que son tan injustas como inevitable.
La desolación nos invade de forma inesperada y se instala en nuestros huesos cuando muere una persona joven, si es amiga más y si es una luchadora  contra la enfermedad como ha sido Meritxell, todavía más.
Esté donde esté, seguro que la acompañara su dulce sonrisa tal como ha hecho hasta el final de sus días. Durante las conversaciones nocturnas cuando estaba ingresada en el hospital cada vez he podido admirar  más la fuerza que se puede llegar a tener durante la adversidad y la dura lucha por la propia vida.
Hasta siempre… mientras dure.

 
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