Hace ya unos años que por lo visto tenemos síndrome post vacacional.
Antes algunos simplemente tenían mala leche al ir a trabajar. Eso les pasa cada vez que vuelven de vacaciones pero también les empieza a dar los domingos a media tarde.
En estos tiempos revueltos que nos ha tocado vivir ( por supuesto las epidemias de cólera y las guerras han de ser peores), nos tenemos que enfocar de otra manera.
Supongo que dadas las características de mi trabajo lo tengo fácil para relativizar, pero también es cuestión de empeño.
Cada vez que oigo a alguien : ” que tal las vacaciones?” Y ellos mismos se contestan: las vacaciones van siempre bien.
PUES NO.
Las vacaciones no van siempre bien. Hay gente que no ha podido hacer nada por muchos motivos, pero a parte de,los estrictamente económicos, los hay de muchos tipos. Que pasa con los que se han pasado el verano en el hospital? O empezando la quimio? O recuperándose de alguna otra porquería de las muchas que podemos tener, o los que sin tener nada grave se han quedado inmovilizados en casa esperando a que les llamen para operarse de alguna tontería ….etc etc etc.
Es decir queridos, que el que pretenda tener síndrome post vacacional es porque ha tenido vacaciones. Si ha tenido vacaciones, es por que tiene trabajo.
En ese caso el que tienen trabajo, ha tenido vacaciones y las ha podido disfrutar, es que a demás tiene salud.
Menos síndromes y a ver que podemos hacer para mejorar nuestro día a día para poder ir a trabajar sin llorar y tener una vida lo más feliz posible ( sin cachondeo, ese es el plan).
Empezamos el curso con listas de objetivos a cumplir, pero si no les ponemos fecha, solo son ilusiones…
Está claro que si dentro del puzzle de todo lo que forma nuestra existencia, no movemos ninguna ficha de sitio, seguiremos obteniendo los mismos resultados.
Empieza con el nuevo curso moviendo las fichas necesarias y de vez en cuando, comprueba que lo que estás haciendo te acerca al lugar donde quieres ir.
El resto son películas y ganas de refunfuñar.
Hoy he empezado mis clases particulares de inglés al aire libre, tal como me comprometí antes de agosto y eso que mañana es 11S y es fiesta, que los niños no van al cole etc pero si lo dejo más…seguro que encuentro alguna excusa para no quedar ( ahora lo llamamos procastinar, que viene del latín al menos y no del inglés).
La buena planificación es esencial para sacarle partido a esta vida que llevamos tan compleja.
Animo, fuera síndromes y cuando no te aclares , pide ayuda que hay muchos profesionales podemos echar una mano.
Ahir llegia el teu escrit i pensava que tens raó al dir que “menos síndromes”, la veritat és que es van inventant denominacions per explicar coses que han passat tota la vida i li acaben donant una identitat que pot resultar equívoc. Jo fa un temps vaig escriure un article sobre el síndrome post-vacacional, me’l va demanar una revista comarcal, semblava que si no en parlaves es que no estaves al dia, quines coses passen!!
Suposo que una cosa no treu l’altre, centrant-me en el que dius. Els que tenim la fortuna de treballar i fer vacances, en els temps que corren, hem de posar més rellevància en la part bona que no pas en la mandra que pot fer, en algun moment, reincorporar-se a la feina.
Crec que hi ha una tendència general a generar estats d’opinió sobre les coses, arrossegar a la gent a no pensar gaire, a explicar les coses de manera que si no les subscrius és que no en saps d’allò. I així ens va!!
Acabem fent un problema d’una cosa que només forma part de la vida.
Les persones que desenvolupen una situació crítica per tornar a la feina segurament ja tenen una situació crítica a la vida i aquest és un aspecte més, o la situació laboral ja era complicada abans de les vacances.
Esperem que la població no es deixi enganyar gaire i faci servir el sentit comú per posicionar-se davant les dificultats.