La obsoleta frase de ¿estudias o trabajas? que los de una cierta edad comprendemos sin dificultad, ya que hubo un tiempo en que los que por diferentes motivos no seguían estudiando, se ponían a trabajar…
¿Cuantos de nosotros desperdiciamos ingentes cantidades de tiempo en reclamaciones, papeleos inútiles y rehaciendo gestiones que se han hecho mal….?
La sensación de impotencia al llamar a las compañías telefónicas de todos es sabida por experiencia propia y algunos afortunados de oídas, se va extendiendo como una epidemia.
Los bancos, los únicos validos son los de sentarse afortunadamente en alza en Barcelona. Si encuentras tu sucursal indemne después de alguna fusión, te armas de valor, claro que con menos sucursales, menos personal y menos interés, lo único que va a más son las colas y los problemas. Otra modalidad fascinante es que te cobran por todo pero para que te lo hagas tú desde casa.
En el paroxismo de la desidia, me encuentro que he de reclamar hasta para pagar trabajos de imprenta por ejemplo… cosa que no voy a hacer más. Palabrita del niño Jesús. Que me persigan.
No estoy lamentándome, constato hechos. Son hechos tristes, porque si no trabajamos con un cierto interés, se nota y es desagradable. Empresas de servicios que no se hablan entre ellos y has de enviar un correo a dos personas diferentes «por que no lo han recibido».
Pero ¿reclamamos realmente o solo protestamos y hacemos pataletas en la intimidad?
Hace poco en un restaurante con mesa reservada y confirmada el día antes a las 9. Llegaba la gente y les decían la mesa era a las 9.30. Aquí si que reclamé directamente a la encargada que me atendió telefónicamente 24horas antes. No hubiese sido más profesional/honrado decir que los de la mesa no se levantaban, que nos invitaban a una cerveza y que estaban haciendo todo lo posible? Pues no… mejor desacreditar al que ha hecho y reconfirmado la reserva.
Seguramente reclamamos poco y mal.
Poco, porque muchas son las veces que la incompetencia y falta de profesionalidad es superlativa y más ahora que todos sabemos de todo. Mal porque enfadarse, gritar, etc… nos perjudica a nosotros.
Reclamemos con serenidad y constancia.
Es mucha la energía que perdemos en este tipo de gestiones eternas.
No todo vale y tu tiempo no regresa.
Afortunadamente somos seres adaptables y nos hacemos a vivir en la incertidumbre con más o menos aceptación y alegría dependiendo del grado de evolución/tragaderas de cada uno.
Y tu: ¿estudias, trabajas o reclamas?
PD: no quiero que nadie más me diga: ES LO QUE HAY.
Totalment d’acord amb tu, Marga!
Això sí, si volem que una reclamació sigui efectiva, sempre l’haurem de cursar per escrit. De res serveix queixar-se al primer que ens agafa el telèfon ja que segurament la nostra queixa no arribarà més enllà de desfogar-nos i per tant tampoc solucionarem el problema, però crec que generalment i m’incloc, és el que fem …
Dons a rundinar poc, treballar bé i queixar-nos per escrit!
Casi ná.
Gràcies per escriure!
Crec que hi ha que reclamar, si és per escrit millor. Però a mi m’ha passat reclamar i sorprendre’m del resultat. Vaig reclamar uns SMS de pagament que rebia el meu fill al seu mòbil i els vaig recordar que jo havia donat ordre que aquest mòbil no pugés rebre SMS. Hem van tornar els sous i hem varen rebaixar la factura del mes següent un 20%. En Kiabi, no hem varen enviar una samarreta que había demanat i no l’han cobrada i m’han donat un descompte per la pròxima compra ( sense reclamar-ho jo). Així que seguiré gastant energia en reclamar, fins ara m’ha anat molt bé.
La veritat és que a mi també m´ha donat bon resultat…